SUDÁFRICA

Safari de fauna salvaje en la nación arcoiris

El país que albergará el Mundial de Sudafrica 2010 y el que posee la mayor población ceropositiva del mundo. Así se define Sudáfrica: un país de contrastes.

Un país lleno de contrastes, la República Sudafricana invita a vivir lo más salvaje de la naturaleza y a dejarse conquistar por la calidez de la gente. Sudáfrica tiene mucho potencial turístico, cultural y natural para tentar a viajeros y aventureros.

El país cuenta con una consolidada estructura hotelera y turística para recibir un volumen de viajeros que deseen aventurarse en la sabana africana y admirar la naturaleza en estado puro y salvaje.

Sudáfrica, poseedor de un clima que se mantiene agradable todo el año. El sur del país es más bien seco y el norte se torna un poco más tropical.

Salir de safari es un obligado para quienes se adentren en Sudáfrica. Leones, elefantes, rinocerontes y jirafas forman parte de la fauna que sorprenderá a los viajeros. También se pueden ver hipopótamos y cocodrilos en su ambiente natural y una variedad inmensa de aves que recorren los cielos sudafricanos.

Al mismo tiempo, la cosmopolita Ciudad del Cabo nos ofrece una intensa inmersión en la historia nacional que nos permite entender la formar de ser y hacer de los sudafricanos en la actualidad. El apartheid es parte constitutiva de la nacionalidad sudafricana hoy y en la ciudad se pueden encontrar espectaculares y educativos museos para informarnos al respecto (como el Museo del Apartheid).

Safari en tren
Para los amantes del lujo, los trenes de época, los paisajes accidentados y los animlaes salvajes, un safari en tren entre Durban y Pretoria, en Sudáfrica, es una oportunidad que no se pueden perder. Organizado por el operador Rovos Rail. Es un safari como en los viejos tiempos, con la posibilidad de ver ejemplares de las cinco grandes especies de mamíferos: leones, leopardos, elefantes, rinocerontes negros y búfalos.

Las reservas de Swazilandia son uno de los mejores lugares para ver al amenazado rinoceronte negro

Los antiguos vagones de madera perfectamente restaurados constituyen una atracción en sí mismos, pero además, en el último tramo del viaje, el tren es tiradopor unalocomotora de vapor.

El safari dura 3 días y 2 noches. Las fechas para realizarlos son de enero a abril y de octubre a novienbre, un safari por semana. La estación seca del invierno es óptima para ver animales salvajes porque las hiervas están bajas, no hay hojas en los árboles y los animales se acercan a las charcas de agua con regularidad.

Al salir de Durban, primero sorprenden las exuberantes colinas de KwaZulu-Natal y las aldeas con cabñas redondas, y después la llanura de Swazilandia. El segundo día, bientemprano, se puede disfrutar de una primera salida en la Reserva de Caza Mkhaya: partiendoantes de amanecer en Land Rovers descuviertos, se pueden observar a los animales antes de ser vistos por ellos. Un poco más al norte, ya al atardecer, se puede hacer otro recorrido similar en el famoso Parque Nacional Kruger, y acontinuación degustar uan tradicional comida boma. El boma, un patio donde se cocina la comida en una barbacoa, está rodeado de fuegos brillantes para asustar a los animales e impedir que se acerquen. A la mañana siguiente,mientras se disfruta del desayuno, el tren realiza una subida impresionante por el escarpado Drakensberg y, por la tarde, llega a Pretoia.

Fuentes:
inafrika.org
krugerparktour.com
rovos.com